Frwydr Cofiadwy (Batalla memorable) 

 Personajes:
● Tarddiad (Origen)
● Pen (Fin)
● Atyniad (Atracción)
● Disgyrchiant(Gravedad)
● Gwahanu (Separación)
● Grym (Fuerza)

Explicación : La Gravedad, la formación y destrucción del universo.
Época: Hace 15.000 millones de años y cada 20.000 millones de años.
 Lugar: Ddinas (ciudad), Uffern (infierno), Baradwys (paraíso) y Cysylltiad (Nexo).

Siempre ha revoloteado por nuestras mentes el cómo se formó el universo, y esta historia de su creación, así como las fuerzas que luchaban en pos de la creación o de la destrucción, se remonta eones atrás, durante la batalla de Tarddiad y Pen. Tarddiad era el más poderoso, leal y honrado de todos los dioses, nacido muchísimo antes de esta guerra a través del mater trigger. Pero tras su nacimiento y que su corazón empezara a latir, se produjo, debido a la gran liberación de energía, otro nacimiento completamente opuesto; Pen, un ser horrible, mezquino y despiadado. Tarddiad separó de sí una parte, de la que surgió Atyniad, la diosa del amor y la sabiduría. Tarddiad volvió a despojarse de una pequeña parte de su ser, creando entonces a Disgyrchiant, el dios de la batalla, la astucia y la fuerza. Tras esto, Tarddiad se sumió en un profundo sueño, dejando en manos de sus creaciones el origen de una vida paralela a la suya.

Entonces Disgyrchiant creó el espacio conocido como Baradwys, que comenzó a expandirse, y el tiempo, que comenzó a correr. Atyniad aprovechó esta todopoderosa creación para originar a los humanos y sus sentimientos. Mientras tanto, Pen se encontraba resentido y apartado, nadie se hubo percatado aún de su presencia. Con todo el odio del mundo quiso destruir la obra que habían creado los hijos de Tarddiad, y para ello creó a Grym y Gwahanu, reflejando toda su ira y su gran fuerza, del mismo calibre que la de Tarddiad. Fue así como les encomendó a sus hijos la destrucción del mundo que habían creado. Entonces, siguiendo el ejemplo de sus Doppelgangers, crearon una dimensión distinta; Uffern. Formaron bestias horrorosas con habilidades sobrehumanas, preparándolas para la batalla que se avecinaba. 
Ante la creación de tales aberraciones, Disgyrchiant y Atyniad decidieron despertar a Tarddiad de su letargo, para poder defenderse en una batalla que ocurriría tras siglos de preparación, y de la que dependería el devenir del universo. Así fue como los habitantes de la primera civilización creada, Ddinas, fueron entrenados en el arte de la batalla por Disgyrchiant. Finalmente, tuvo lugar una batalla que duró muchísimo tiempo, por momentos librada en Uffern, y por momentos librada en Baradwys. Pero fue en Cysylltiad, el espacio de unión entre ambos, donde comenzó la batalla final. Tras una alentadora victoria de los humanos, Pen, Grym y Gwahanu descendieron al campo de batalla, ante los que aparecieron Tarddiad, Atyniad y Disgyrchiant para plantarles cara. Antes de comenzar, Tarddiad recitó unas palabras para fortalecer el alma de sus guerreros: - “De nosotros depende que la vida fluya como nosotros la hemos preparado, y que no se destruya en manos de nuestros enemigos. El devenir del espacio está en nuestras manos. Aunque la batalla esté perdida, siempre habrá una opción. ¡A la victoria camaradas!” 

Tras unos momentos de incertidumbre, comenzó la cruenta y virulenta batalla final, conocida como la “Frwydr Cofiadwy” donde se decidiría hacia que lado se expandería el espacio, hacia Baradwys, o se decantaría hacia Uffern. Después de varios meses de un combate sin tregua y la casi total destrucción de bestias y humanos, la tríada comandada por Pen decidió terminar juntos con uno de los otros dioses, siendo el elegido Disgyrchiant, pues era el más valeroso en batalla. Así fue como unieron fuerzas y se lanzaron, para sorpresa de Tarddiad y Atyniad a por el tercero, que se defendió de la mejor manera, dejando tuerto a Pen, cortando un brazo a Gwahanu, pero no pudo hacer nada a Grym más que debilitarlo, con su apabullante fuerza finalmente derrotó a Disgyrchiant, antes de que Tarddiad y Atyniad pudiesen intervenir. Entonces, todo el cuerpo del dios de la batalla se volatilizaba, En el clímax de la batalla, Tarddiad recogió el cuerpo del valeroso Disgyrchiant, mientras le dijo: - “Disgyrchiant.. lo siento, he fallado, esta guerra toca a su fin y no podrás estar para verlo… no queda elección posible” Tarddiad derramó una lágrima, ante lo que el guerrero esbozó una sonrisa y le respondió: - “Tarddiad, no sólo te considero mi creador y mi maestro, te considero mi amigo. Así que nunca olvidaré tus palabras y espero que tú no lo hagas con las mías. Recuerda; siempre hay elección” Disgyrchiant terminó de evaporarse, pero su espíritu se impregnó en todos los humanos y bestias, objetos y armas, dioses buenos y malvados en batalla. Ante todo su fuerza y poder, cayeron estrepitosos al suelo, siendo una fuerza tan sumamente poderosa para Grym, Gwahanu y Pen que, muy debilitados, fueron incapaces de defenderse ante Tarddiad, que los encerró por siempre en una celda de otra dimensión. Tarddiad terminó de dispersar el espiritu de Disgychiant por todo el espacio, para mantener una fuerza para que nunca se separará, y junto a la celda de la vil tríada, manteniéndolos sin un ápice apenas de su poder. Fue así como la fuerza de atracción de Disgyrchiant desequilibró la balanza en pos de la creación del universo que conocemos. Pero, según cuenta la leyenda, esta fuerza disminuye poco a poco, y cada 20.000 millones de años, se produce una rotura que podría liberar a Grym, Gwahanu y Pen, librándose de nuevo la Frwydr Cofiadwy ante la que ganará la creación de Baradwys, o la destrucción de Uffern. La fuerza de Disgyrchiant desequilibrará finalmente la balanza.

Moisés Z.D.R. 2014-1015