Nox  y Día   

 

Personajes:  

• Gea: madre de Día y Nox. (Personificación de la Tierra) . 
• Tártaro: pretendiente/ esposo de Día y Noche. (Personificación del inframundo). 
• Día: hija de Gea. (Personificación de la  mañana). 
• Nox: hija de Gea. (Personificación de la noche). 

Época: Tras la creación de Gea y Tártaro 

Lugar: Indeterminado 

Tiempo después de la creación de Tártaro y Gea. Esta se encuentra aburrida y triste al estar sola, con lo que decide crear a Día, una joven no muy lista pero tan hermosa que a su paso desprendía una luz jamás vista hasta entonces. Día tenía un carácter algo complicado, era simpática pero a la vez era muy vanidosa. Sin embargo, Gea se llevaba muy bien con ella, durante un tiempo todo marchaba fenomenal y Gea ya no se sentía sola.  

Una mañana como otra cualquiera Día salió a pasear pero notaba algo distinto, alguien la estaba siguiendo, caminó durante largo tiempo esperando que el que la estuviera siguiendo se cansara, pero esto no sucedió y Día fatigada de tantas horas caminando se giró y dijo: 

• "Que se muestre aquel que me osa importunar" dijo Día. 

Casi de inmediato surgió una sombra detrás de un árbol, Tártaro, un hombre que Día nunca había visto, y como si de dos fuerzas se tratarán, cayó enamorada de él. Tártaro que por aquel entonces buscaba alguien con quien casarse creyó que Día era una muy buena candidata, todos a su alrededor lo envidiarían por tal belleza, con lo que se aventuró y le dijo a una enamoradiza Día: 

• "No era mi intención molestaros bella dama, pero me quedé tan anonadado con vuestra belleza que no pude mas que seguiros", dijo Tártaro. 

Tras este primer encuentro Tártaro y Día se siguen viendo, estos encuentros son cada vez más seguidos y durante más tiempo hasta que en unos de esos encuentros Gea se da cuenta de lo que pasa y no queriendo quedarse sin la compañía de Día decide crear a Nox para que esta mate a Tártaro.  

Nox a diferencia de Día, era más lista, además, su personalidad era muy atrayente y tenía un aura de misterio e intriga que la rodeaba. Sin embargo, la luz desprendida por Nox no se comparaba a la de Día, ya que esta era más tenue y oscura.  

Gea queriendo dar inicio a su plan, para no perder a Día, le dijo a su hija Nox: 

• "Tu hermana Día esta siendo engañada por Tártaro y este planea librarse de ella en cuanto pueda, tenemos que evitarlo, confío en ti, así que te confiero la siguiente misión. Ve hacia el fondo de los amplios caminos en donde se encuentra Tártaro y, mientras éste este durmiendo, mátalo". 

Nox dispuesta a cumplir la misión para conseguir ser la favorita de su madre, se encaminó hacia donde Tártaro vivía. El camino resultó ser mas largo y duro de lo que esperaba y mientras se tomaba un descanso  para coger aire, de entre las sombras de los árboles apareció un hombre. 

Tártaro que ya se olía lo que Gea tramaba intercepta a Nox por el camino, con la intención de matarla, pero una vez la vio no pudo seguir con su plan original, pues la chica estaba rodeada por un aire de misterio que le gustó mucho, además, se replanteo su decisión de casarse con Día, pues se preguntaba si sus amigos no sentirían más envidia al tener una joven tan lista y misteriosa a su lado.  

Nox sorprendida y un poco asustada al ver al hombre le pregunta: 

• "¿Quién eres? ¿Nunca te han enseñado a no aparecer de la nada?". 
• "Pues la verdad es que esa clase me la salté, pero quizás tu me la puedas dar", dijo con guasa Tártaro. 

Tras estas primeras frases vinieron más y, para cuando Nox se da cuenta de que aquel hombre era Tártaro ya estaba locamente enamorada de él, y abandonó su misión. 

Gea no pudiendo creer tener tan mala suerte fue en busca de ese usurpador de hijas como le había apodado ella misma. Sin embargo, no se sorprendió al ver a Tártaro esperando por ella . 

• "Creo Gea que antes de que te cojas un berrinche inútil deberías escuchar mi maravillosa y generosa propuesta", dijo Tártaro. 
• "Los dos sabemos que no sería inútil pero como estoy de buenas, te escucho", contestó Gea. 
• "Por todos es conocido que busco una esposa, bueno en realidad busco a la mejor esposa, y he elegido a tus hijas para llevar acabo esa acción". 
• "¿A mis hijas? ¿A cuál de las dos te refieres? No pienso renunciar a ninguna Tártaro", dijo Gea enfadada. 
• "Eso es lo mejor de todo, no tendrás que renunciar a ninguna de las dos y ahora te explico el porqué ya que veo que no estas muy atenta hoy", dijo Tártaro. 
• "Cuidado hombrecillo no te juegues tu hombría", amenazó Gea. 

Asiendo caso omiso a esta amenaza Tártaro se dispuso a explicarle su brillante plan. 

• "Bastante tiempo me ha tomado llegar a la conclusión de que no existe la esposa perfecta, aquella que físicamente sea hermosa y mentalmente sea lista. Con lo que, he decidido tomar dos esposas, dos mujeres que sean perfectas en cada uno de los campos, y así hacer una de dos. ¿No te parece una idea alucinante?", dijo Tártaro. 
• "Pretendes hacerme creer que mis hijas aceptarán tal estúpida idea", habló Gea. 

• "Pues la verdad es que no había pensado en ello pero junto con tu ayudada eso no será un obstáculo", dijo Tártaro. 
• "¿Y yo por qué debería ayudarte?" 
• "Pues por la siguiente razón florecilla, mi idea consta de estar parte del tiempo con una y la otra parte de ese tiempo con la otra. Así seré la envidia de todos pues, no sólo consigo dos esposas si no que además consigo unas esposas perfectas en cada uno de los campos", habló Tártaro. 
• "¿Y yo pasaría el tiempo con la que no estuviera contigo?", preguntó Gea. 
• "Exacto, para ser más precisos 12h con cada una. Primero con una y luego con la otra, sin privarte de estar con ninguna de ellas. ¿Aceptas?". 
• "Si", dijo Gea sin pensárselo mucho. 
• "¿Tu crees que se darán cuenta de lo que hemos tramado?", preguntó Tártaro. 
• "No creo, están demasiado entusiasmadas contigo para fijarse en otra cosa", tranquilizó Gea a Tártaro. 
• "Entonces empezaremos ahora mismo con el plan. La primera será Día ya que la conocí antes, te la devolveré pasado 12h y le tocará entonces el turno de la noche", dijo Tártaro.  
• "¿El turno de la noche? ¿Pero con cuentas pretendes estar?", preguntó una confusa Gea. 
• "Con tus dos hijas tonta, ya te lo he dicho. Con el turno de la noche me refería a Nox, será nuestro nombre en clave para referirnos a ella, ¿no te parece genial?", dijo un entusiasta Tártaro. 
• "Mmm... Entonces el turno de mañana será el nombre en clave de Día", concluyó Gea. 

Y así fue dividido el tiempo de las hijas de Gea , ¿alguna vez Nox y Día se enteraran de este pacto entre su madre y su esposo?

Judit P.M.